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¿Cómo debería ser la lavandería de un hospital?

lavandería hospital barrera sanitaria

Cuando hablamos de cómo funciona un hospital, no solamente tenemos que pensar en la parte técnica y profesional, en los turnos, número de camas o gestión de pacientes. También hay que tener en cuenta toda la ropa hospitalaria que se lava al día y en cómo debería ser la lavandería de un centro hospitalario. No debemos olvidar que la ropa sucia, por estar continuamente en contacto con el personal sanitario así como con pacientes enfermos, es un foco de contaminación y bacterias.

 

Es por ello que, en los centros sanitarios, tenemos que hacer hincapié en la importancia de una solución de barrera sanitaria para la gestión de la lavandería. La solución completa de PRIMUS diferencia el proceso en distintas fases:

 ¿Cuáles son los procesos de lavandería en un hospital?

  1.  Recogida y clasificación: El personal encargado de la recogida, lleva a cabo la clasificación previa de la ropa y separar las distintas cargas de lavado en función del tipo de lavado utilizando siempre guantes de protección.
  2.  Almacenamiento: La ropa blanca se debe almacenar durante menos de 48 horas y los carritos de transporte se deben limpiar antes de cada uso. También se requiere una sala específica con una menos presión de aire, estación de lavado y suelo hospitalario sin uniones.
  3. Lavado: Las cargas de lavado del mismo tipo se procesan conjuntamente para evitar la contaminación cruzada entre la zona sucia y limpia. El sistema Primus Trace-Tech controla la temperatura, la mecánica, el tiempo y los productos químicos y, de este modo, garantiza una calidad de lavado óptima.
  4. Acabado: El personal que se encarga del manejo de la ropa limpia se desinfecta las manos previamente. Se deben utilizar guantes para evitar que la ropa se vuelva a contaminar.
  5. Almacenamiento limpio: La ropa limpia se debe almacenar directamente tras su procesamiento y se debe envolver en plástico en armarios cerrados. La sala y los carros se deben limpiar regularmente y se deben respetar los flujos separados de ropa limpia y sucia.

 

No puede haber ninguna posibilidad de cruce entre zonas de ropa sucia y limpia, porque una prenda no puede volver atrás una vez que ha comenzado el proceso de lavado desde la recepción.

 

Se puede afirmar, por tanto, que el proceso de lavado en un hospital es una cuestión de salud e higiene pública.

 

 

 

 

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